domingo, 29 de agosto de 2010

Sziget Festival

Sziget Festival es uno de los eventos musicales más grandes de Europa. Por casi una semana, a mediados de agosto, en una isla de Budapest se vive una especie de universo paralelo. Como una ciudad en miniatura en Sziget se puede acampar, comer, hacer yoga, practicar algún deporte extremo, comprarse un teléfono móvil, embarrarse hasta las rodillas, "casarse" al estilo Las Vegas y encontrarse con gente de distintas partes del mundo. Ah, y claro, de paso escuchar alguna buena banda en alguno de los tantos escenarios y carpas temáticas. No por nada, con 18 años de historia, algunos lo llaman el Woodstock del Danubio. La isla de Obuda está a sólo 2 kilómetros del centro de Budapest y se puede llegar muy fácil en el tren de cercanías (HEV) o en autobús.

Si quieren ver más fotos, acá o acá tienen una galería de imágenes del sitio húngaro Origo.

jueves, 5 de agosto de 2010

De fotos y casamientos

Creo que se conoce mucho acerca de un nuevo lugar y su gente a partir de la forma en que celebran los grandes acontecimientos, por ejemplo un casamiento. Angie Petrik comenzó a trabajar como fotógrafa de bodas hace seis años, inspirada por el trabajo de un colega al que estaba ayudando con las tareas de edición. "Ahora no podría ser más feliz", me cuenta, "me encanta conocer gente, ir a nuevos lugares y amo todo el desafío de un día de casamiento".
A Angie la conocí en la fiesta de mi amiga húngara Gabriella y me sorprendió la forma que tuvo de encarar todo. De movida una actitud increible no sólo para arrear a los invitados para una foto multitudinaria en la escalera, sino para capturar momentos durante la noche y hasta tomarse un recreo y bailar como una más. ¿El resultado? Un hermoso albúm de fotos, una presentación en video que hace que se te caiga un lagrimón, y una amiga que no se puede decidir cuál de todas las imágenes poner en la pared de su casa. Yo voto por esta:

¿En cuántos casamientos trabajó Angie? Bueno, me confiesa que ya perdió la cuenta, allá por el número 80. Para ella el aspecto más importante -y eso se nota en las imágenes que se pueden ver en su página- es lo natural. "Siempre trato que la pareja esté tranquila, hacer que se sientan cómodos enfrente de la cámara y en el momento en que haya conexión tratar de capturar momentos íntimos y divertidos. Aún durante la ceremonia sonreir puede ayudar mucho".

-¿Cuáles son las cosas que te gusta hacer y cuáles no?
-Amo crear esa conexión con la pareja y con la gente que fotografío en general. Me siento muy bien cuando alguien me pregunta si soy amiga de ellos (aún cuando en general es la segunda vez que los veo). Realmente odio correr con las sesiones de fotos y no me gusta nada cuando alguien me dice "ah, te pagan para divertirte" (que es en parte verdad, pero ellos no ven cuánto trabajo tengo después de la parte divertida).
-¿Cuáles son tus fotos preferidas en una boda?
-Las fotos de los preparativos. Es este el momento en que no tengo grandes presiones y puedo tomarme el tiempo para ser más creativa.

-¿Es fácil pedirle a los novios que se animen a actuar o hacer cosas más descontracturadas?
-Sólo les pido hacer cosas "locas" si se sienten cómodos con eso. Pero el 90 por ciento de las parejas, después de 20 minutos de precalentamiento con la lente, están listos para hacer casi todo. :)

¿Se acuerdan cuando les conté acerca de algunas tradiciones húngaras? Bueno, acá pueden ver el vestido rojo, que la novia en general se pone después de las 12. Y los novios también se cambian la camisa, para estar a tono. ;)

Y de paso, gracias a Angie, pueden ver algunos lugares claves de Budapest. Como el Puente de las Cadenas de noche....

El Museo Ludwig (también en la foto de apertura)...

Y no sólo hay fotos en Budapest. Sino por ejemplo en Szeged, especificamente en el Museo Móra Ferenc.
O hasta en el campo!

Bueno, eso es todo. Viva el amor...sobre todo si hay fotos tan lindas! ;)

martes, 3 de agosto de 2010

Római, un paseo a orillas del Danubio

A veces me sorprende la facilidad que existe en Budapest para evadir la sensación de estar en una ciudad y, aunque sea por unas horas, ver un poco verde y respirar aire puro. Uno de esos lugares es Római Part, a orillas del Danubio (en Óbuda, distrito III). En bicicleta es un poco más de media hora de pedaleo, en un recorrido por una bicisenda, una parte bordeando el río, otra por calles interiores. También se puede ir en el tren de cercanías (HÉV), bajando en la parada de Római Fürdő. O en auto, claro.

En el medio del recorrido ya hay una sorpresa. Entre gigantes edificios comunistas aparece un pequeño oasis alrededor de la plaza principal de Óbuda. Calles empedradas, edificios antiguos, y un combinado de estatuas ideales para sacarse fotos. Escondido ahi mismo está Kobuci Kert (jardín), un lugar para tomar algo, probar el famoso Kobuci (un pan tostado con distintos ingredientes encima, como chorizo, tomate y cebolla), escuchar algún concierto y hasta bailar danzas folklóricas húngaras.

Római es un lugar ideal para aprovechar la oferta gastronómica. A pesar de que en Hungría no hay mar, de alguna manera se las arreglan para transmitir el sentimiento playero y todos estos lugares ofrecen merluza (Heek). Digamos que no es el plato más liviano que pueden comer, ya que en general a este pescado lo venden empanado y frito, pero es delicioso. Se puede acompañar con papas o aros de cebolla, pepino en conserva y, claro, paprika. ¿De postre? Por ejemplo panqueque (palacsinta) rellenos con queso cottage, Nutella o cacao.

Pero no todo es comida. Si les interesa la arqueologia, ahi cerquita tienen las ruinas de la antigua ciudad romana de Aquincum (Hay una versión que dice que Marco Aurelio escribió parte de su libro Meditaciones allí). Y, en plan más deportivo, pueden alquilar kayaks para recorrer el Danubio. Para los días de mucho calor, el Spa Római Fürdő es una buena opción, con tres piscinas al aire libre (ideal para ir con niños).
¿Ven? Un pequeño recreo urbano muy cerca del centro de Budapest. ¿Conocen otros rincones así? ¿Cuál es su lugar preferido para alejarse del cemento?